martes, 8 de enero de 2013

Tzompantli del "Fin del Mundo"

Hace mucho que no pintaba un graffiti de dimensiones considerables, el 2012 estaba por concluir así que mi hermano "Drink" y yo quisimos  conmemorar que sobrevivimos al fin del mundo, jajaja, pintando el 24 de diciembre una barda que teníamos olvidada, mientras en casa preparaban la cena.




Los mayas y los aztecas contaban con calendarios solares, para ellos habían existido 4 soles antes del sol actual, el quinto sol, el sol de nuestra era concluiría  el 21 de abril del 2012. Al concluir este empezaría un nuevo sol, el cual estaría marcado por un cambio constante en la evolución de pensar del hombre. La comunión de la conciencia del hombre con su entorno.



El Tzompantli

Para muchas de las culturas antiguas del Anahuac  la muerte simbolizaba un cambio, un cambio de esta vida a otra en el inframundo, donde iban los muertos y lugar de los que aun no nacían, el sexto sol supone un cambio grande y fuerte, el hombre viejo tiene que morir y el hombre  nuevo de gran  pensar, tiene que nacer. El "Tzompamtli" en su traducción literal quiere decir fila de cráneos, lo cual coincide con su descripción gráfica, éstos se utilizaban para rendir homenaje a los hombre y guerreros caídos en la guerra, también se colocaban los cráneos del bando opuesto, ya que nuestras culturas ancestrales  tenían un fuerte respeto por la vida y era necesario purificar los restos de los caídos por ambos lados, algunas veces se le regresaban al bando opuesto los restos de sus alto mandos que habían muerto, para que su  pueblo pudiera realizar los rituales correspondientes, cuando los españoles vieron este acto de honor entre 2  bandos en guerra se espantaron y lo satanisaron. Hay pocos Tzompantlis con cráneos reales, la gran mayoría de estos eran reclamados por sus familias o sus pueblos, los que no eran reclamados, pasaban a formar parte de estos muros de calaveras, casi todos están hechos de  tallado de piedra o piedras preciosas. He aquí la diferencia entre una ofrenda a los dioses y un homenaje (u ofrenda) a la vida de los guerreros.

Por estos motivos fue que decidimos hacer el Tzompantli como fondo de nuestras obras.






Con la conclusión de este muro y del quinto sol, esperamos que empiece un cambio desde adentro hacia afuera,  a la vez le dijimos adiós al 2012 y le damos la bienvenida al 2013, mi hermano Drink y un servidor les decaemos un nuevo comienzo. Que la vida los bendiga.